Esto podría ser posible si el refrigerante líquido que se expulsa entra en contacto con la piel. La mayoría de los aerosoles quitapolvo contienen un refrigerante que permanece líquido cuando se lo mantiene bajo presión. El objetivo de este tipo de productos es pulverizar el vapor y no el líquido, por lo que la válvula está diseñada para capturar el vapor desde la parte superior de la lata. Al agitar la lata, girarla o voltearla, se corre el riesgo de introducir el refrigerante líquido en la mezcla.